Oportunidades y desafíos de presente y futuro
Hugo Gutiérrez Tarifeño – CEO INNOVACIENTE
La convergencia entre la innovación tecnológica y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) ha emergido como un tema crucial en el contexto global, y Chile no es la excepción, a medida que el país avanza hacia un futuro más sostenible, se enfrenta a una serie de desafíos y oportunidades en este ámbito.
Sin lugar a dudas la innovación tecnológica se ha convertido en una herramienta fundamental para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por la Organización de las Naciones Unidas, este vínculo entre tecnología y sostenibilidad está siendo explorado cada vez con mayor ímpetu, con el fin de abordar los desafíos ambientales, sociales y económicos que enfrenta el país.
Parte de los desafíos actuales son la Brecha Digital, y aunque Chile ha avanzado significativamente en términos de acceso a Internet y tecnología, persiste una brecha digital que afecta a comunidades aisladas y rurales, esta disparidad dificulta el acceso equitativo a la información y a las oportunidades que brinda la innovación tecnológica.
Por otro lado si bien la innovación tecnológica puede contribuir al desarrollo sostenible, también puede tener un impacto negativo en el medio ambiente si no se gestiona adecuadamente, por ello es importante que la producción y el desecho de dispositivos electrónicos, sean eficientes y respetuosos con el Medio Ambiente en términos de gestión de residuos electrónicos y huella de carbono, y en esa misma línea la gestión de residuos también presenta oportunidades para la innovación tecnológica, desde aplicaciones móviles que facilitan el reciclaje y la recolección selectiva, hasta sistemas de procesamiento de desechos que los transforman en recursos valiosos, Chile ha avanzado en la adopción de soluciones tecnológicas que promueven la economía circular, y por último en este punto un desafío prioritario es la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
La electro-movilidad ha sido un área de innovación destacada, con la proliferación de vehículos eléctricos y el despliegue de infraestructura de carga en todo el país, se suma a esto el uso de energías renovables como la solar y eólica ha sido fomentado mediante el desarrollo de tecnologías cada vez más eficientes y asequibles.
Más allá de los desafíos ambientales, la tecnología también ha sido pilar fundamental para abordar problemas sociales, las plataformas digitales han democratizado el acceso a la educación y la salud, especialmente en áreas rurales, mientras que la automatización y la inteligencia artificial han mejorado la eficiencia de los servicios públicos y la toma de decisiones gubernamentales.
Sin embargo, aún quedan desigualdades sociales, donde la adopción desigual de la tecnología puede exacerbar las desigualdades sociales en Chile, las personas con bajos ingresos pueden quedarse rezagadas en términos de acceso a la educación digital, oportunidades de empleo y servicios gubernamentales en línea, lo que perpetúa la brecha socioeconómica.
Sin duda los desafíos que tenemos son vastos y complejos, pero ya claros, por ejemplo, fomentar la innovación inclusiva y para ello es fundamental promover políticas y programas que fomenten la innovación inclusiva, asegurando que todos los sectores de la sociedad chilena, en especial comunidades aisladas y pobres, tengan acceso y participen en el desarrollo y la adopción de tecnologías innovadoras, esto incluye iniciativas para capacitar a comunidades marginadas en habilidades digitales y facilitar su acceso a recursos tecnológicos.
Por otro lado, la integración de los ODS en la agenda tecnológica, donde Chile debe y puede integrar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en su agenda tecnológica nacional, claro esta acción implica alinear las políticas de innovación y tecnología con los objetivos de desarrollo sostenible, identificando áreas prioritarias donde la tecnología pueda tener un impacto significativo en la consecución de los ODS.
Como uno de los mayores desafíos es la gestión responsable de la tecnología, que permita mitigar el impacto ambiental de la innovación tecnológica, Chile necesita implementar medidas de gestión responsable de la tecnología, por ejemplo, políticas de reciclaje electrónico, incentivos para la producción y el consumo sostenible de tecnología, y la promoción de prácticas estatales y empresariales responsables.
Las proyecciones futuras son muchas, sin embargo, tres son las que se llevan las prioridades, la primera es el liderazgo en tecnologías sostenibles, donde la nación chilena tiene el potencial de convertirse en un líder regional en el desarrollo y la implementación de tecnologías sostenibles, incluyendo energías renovables, movilidad eléctrica, agricultura inteligente y soluciones tecnológicas para la adaptación al cambio climático.
La colaboración público-privada: La colaboración entre el sector público y privado será fundamental para impulsar la innovación tecnológica en línea con los ODS. El establecimiento de alianzas estratégicas y programas de financiamiento conjunto puede acelerar el desarrollo y la adopción de soluciones tecnológicas sostenibles.
El liderazgo y la colaboración deben ir siempre acompañado del empoderamiento ciudadano, donde nuestro país puede avanzar hacia un futuro más sostenible empoderando a sus ciudadanos a través de la tecnología, la participación ciudadana en la toma de decisiones, la transparencia gubernamental a través de plataformas digitales y el acceso a la información sobre sostenibilidad son aspectos clave que pueden fortalecer la democracia y promover el desarrollo sostenible.
Sin embargo, los esfuerzos para integrar la innovación tecnológica y los ODS en Chile no están exentos de obstáculos, la brecha digital, la falta de infraestructura en algunas regiones y la resistencia al cambio, son algunas de las barreras que deben superarse. Además, la coordinación entre los sectores público, privado, académico y civil es crucial para alinear los esfuerzos y maximizar el impacto.
En conclusión, la innovación tecnológica ofrece oportunidades significativas para avanzar hacia un desarrollo más sostenible en Chile, pero también plantea desafíos importantes que deben abordarse de manera integral y colaborativa.
Al integrar los ODS en la agenda tecnológica nacional y promover una innovación inclusiva y responsable, Chile puede liderar el camino hacia un futuro más próspero y equitativo para todos sus ciudadanos.
A pesar de estos desafíos, las perspectivas para Chile son alentadoras. La estrategia nacional de innovación y desarrollo tecnológico, así como la creciente conciencia ambiental de la población, han posicionado al país como un líder regional en la búsqueda de soluciones sostenibles impulsadas por la tecnología.
A medida que Chile continúa invirtiendo en I+D, inversión que es muy baja aún para una mejora sustancial a nuestro modelo, debiendo crear ecosistemas de emprendimiento e impulsando la adopción de tecnologías avanzadas, para que la senda hacia el cumplimiento de los ODS se vuelve cada vez más clara. La innovación tecnológica se ha convertido en un pilar fundamental para transformar a Chile en una nación más verde, equitativa, resiliente y sostenible, capaz de enfrentar los desafíos del siglo XXI.
